El fiscal general de la Unidad Fiscal Salta, Carlos Martín Amad, pidió ayer que se imponga la pena de 18 años de prisión a José Miguel Farfán en el marco del juicio que se le sigue por su participación en un caso de transporte de estupefacientes agravado por el número de intervinientes.
El debate se lleva adelante en el Tribunal Oral Federal N°2, presidido por el juez Abel Fleming e integrado por los vocales Domingo Batule y Gabriela Catalano, quienes tienen previsto dar a conocer este viernes el veredicto y los fundamentos de la sentencia.
Farfán posee una condena previa por narcotráfico y su nombre ganó trascendencia cuando, durante una comunicación telefónica interceptada por orden judicial, develó haber pagado una coima al ex juez federal Antonio Solá Torino (f), quien por este hecho fue luego destituido y condenado.
En su alegato, el fiscal Amad, a cargo del Área de Transición de la Unidad Fiscal Salta, sindicó a Farfán como coautor del transporte de 411 kilos de cocaína. El cargamento fue descubierto el 12 de septiembre de 2013 en la ruta 34, a la altura del kilómetro 680, en Santiago del Estero.
Amad explicó que la droga, que había salido de una finca que fue propiedad de Farfán, en Apolinario Saravia, se hallaba oculta en una camioneta Toyota conducida por Héctor Segundo, quien fue condenado a 11 años de prisión por el Tribunal Oral Federal N°1.
En esa oportunidad, los gendarmes que detuvieron a Segundo secuestraron en el rodado la documentación del vehículo. El utilitario estaba a nombre de Eduardo Daniel Catán, quien recibió una condena de 17 años de cárcel por este hecho. Por el mismo episodio es juzgado ahora Farfán.
Segundo también fue juzgado por otro hecho en el que se incautaron 390 kilos de cocaína, en la causa conocida como El Chaguaral.
Genaro Atilio Ortiz y Eliseo Nieves, éste último encargado de la finca de Farfán, fueron condenados a las penas de 15 años y 7 años de prisión, respectivamente, también por haber participado en ambos transportes de droga, los 411 kilos en Santiago del Estero y los 390, en la finca El Chaguaral.
La alusión de este caso, como el de un tercero en el que se secuestraron 356 kilos de cocaína, fue realizada por el fiscal al momento de describir el escenario en el que se concretaron diversas operaciones de narcotráfico, entramados a los cuales apareció asociado el nombre de Farfán.
Se trata de operaciones que tenían como base distintas localidades del departamento de Anta, zona donde el estupefaciente llegaba mediante la modalidad conocida como “bombardeo de droga”, lo cual exigía que las organizaciones adquirieran campos en la zona bajo la pantalla de actividades agropecuarias.
Acusación
Al referirse a los 411 kilos de cocaína, hecho por el cual Farfán llegó a juicio, el fiscal sostuvo que el acusado tenía dominio sobre esa droga, aunque los investigadores no hubieran podido tomarle una fotografía cuando cargaba las 12 bolsas de arpilleras que contenían el estupefaciente, o en otra acción cerca del cargamento.
“Sucede que esas no son sus funciones, eso queda delegado a otras personas, pues Farfán sabe que no puede ser visto cerca de la droga. Pero sí ejerce el dominio de la misma con la ejecución de órdenes previamente planificadas y conocidas a la perfección por los otros integrantes de la organización criminal”, explicó.
Para el fiscal, Farfán intervino en todo momento de la cadena del transporte, aunque de una manera ausente físicamente. Coordinó la obtención del estupefaciente, dispuso su acondicionamiento y, al momento del embarque, fue al frente de todo el convoy, al volante de un automóvil VW Vento azul, sin que pudiera ser detenido.
El fiscal recordó que, al analizar estos hechos, el TOF Nº 1 de Salta determinó que Catán fue quien “aportó los medios económicos y técnicos necesarios para la comisión del ilícito, siendo que, específicamente, aparecía como dueño de los vehículos utilizados por René Héctor Segundo para el transporte de la droga y por José Miguel Farfán para la acción de barrido de ruta, seguridad y protección del transporte que se realizaba”.
Amad recordó señalo que los jueces dieron por sentado que “el 12 de septiembre de 2013 se pudo constatar la presencia de una camioneta Toyota Hilux, utilizada por Nieves; otra de la misma marca, pero conducida por Segundo y un vehículo marca VW Vento, utilizado por José Miguel Farfán en una estación de servicio de Apolinario Saravia”.
El representante del MPF puso de relieve que este cuadro surge de la investigación realizada por efectivos de la Gendarmería Nacional, quienes vieron a Farfán en ese lugar, al que también acudieron Nieves y Segundo, con lo cual se encontraba probado que la reunión tuvo como finalidad el repaso del plan dispuesto para el traslado de los 411 kilos de droga. La maniobrafue luego frustrada en el control de Peaje Fernández.
Justificaciones del acusado
El fiscal desechó las explicaciones dadas por Farfán, en una audiencia previa, oportunidad en la que justificó el haber estado prófugo por este hecho debido a las malas decisiones tomadas por su abogado defensor de entonces, a quien le endilgó la responsabilidad, como también al ex juez fallecido Solá Torino y a su colega, el ex juez federal de Orán, Raúl Reynoso.
Farfán también inculpó a Nieves, quien era el encargado de una finca que poseía en esa zona. Adujo estar peleado por un asunto de negocios, razón por la cual su empleado lo implicó en este hecho.
Amad rechazó de manera tajante estos argumentos, pues indicó que de haber salido bien la operación todos ahora serían grandes amigos. Calificó de desesperados los intentos de Farfán por desvincularse de Nieves, Catán y Segundo. Remarcó que su presencia en el escenario de los hechos y su relación con aquellas personas ya fue probada en el juicio que terminó con la condena de los tres cómplices.
Tras repasar numerosas pruebas, entre ellas escuchas telefónicas, el fiscal solicitó para Farfán una pena de 18 años de prisión por considerarlo coautor del delito de transporte de estupefacientes agravado. También pidió la imposición de una multa y el decomiso de los bienes secuestrados.
Por su parte, el abogado Mariano Sitelli, defensor de Farfán, solicitó la absolución lisa y llana de su cliente por considerar que no existen pruebas en contra de su defendido, descalificó la investigación y sostuvo que los investigadores del caso sólo quieren ver a Farfán preso y condenado.
fuente: MPF Nación